La Cátedra UNESCO de Diplomacia y Patrimonio de la Ciencia, pionera en México y el mundo al conjugar los dos ámbitos, fue instalada en el Instituto de Biología (IB) de la Universidad Nacional Autónoma de México.
En la ceremonia William Lee Alardín, coordinador de la Investigación Científica de la UNAM, recalcó que las colecciones que están bajo el resguardo de esta casa de estudios y los servicios que brinda son múltiples.
Ejemplo de ello son las colecciones biológicas a cargo del IB, el Servicio Sismológico Nacional, la Biblioteca Nacional y la estrecha relación que mantiene con los institutos nacionales de salud. Todo ello constituye un patrimonio de conocimiento científico, cultural, social y técnico, que es objeto de estudio de una iniciativa como esta, explicó.
Pero no sólo se trata de la creación de conocimiento mediante la investigación, sino de su transmisión a las nuevas generaciones a través de la docencia, la enseñanza y la difusión de la cultura a la sociedad en general. Esos son los tres pilares de la función y misión de la Universidad de la nación.
Todo ello se convierte en un patrimonio que debe insertarse en una comunidad que lo aproveche; además, forma parte de una riqueza colectiva internacional que sólo puede crecer y servir a la sociedad por medio de la diplomacia. Esta Cátedra es un paso en esa dirección, que permite poner todo ese conocimiento al servicio de la colaboración internacional y de México.
En ese contexto se inserta el Memorandum of Understanding que suscribieron en la misma ceremonia las universidades Nacional Autónoma de México y Sharjah (UoS), de Emiratos Árabes Unidos.
Martha Delgado Peralta, subsecretaria de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores, recalcó que esta Cátedra surge como un espacio interdisciplinario de investigación sobre la diplomacia desde y para la ciencia.